EL PLAN ESTRATEGICO DE DESARROLLO
La planificación estratégica del desarrollo, se entiende como un proceso en el que se aúnan los principales actores políticos, económicos y sociales de la comunidad local y regional, para elaborar un diagnóstico compartido sobre las claves para su desarrollo sostenido y sostenible, construir una visión posible de su futuro común a largo plazo y definir los objetivos generales y específicos y los cursos estratégicos de actuación prioritaria tanto pública como privada. La gestión de tal proceso estaría dada por el conjunto de acciones destinadas a impulsar y coordinar los esfuerzos públicos y privados necesarios para desarrollar las estrategias seleccionadas y alcanzar los objetivos propuestos por la planificación. En este marco, el plan estratégico de desarrollo, constituye la herramienta estructurante del desarrollo territorial.
La concreción de un plan de este tipo, implica la implementación de nuevos modelos de gestión y la utilización de nuevas herramientas en la relación entre el estado local y su entorno socio-económico. Su formulación y ejecución requiere de un proceso previo de estudios e integración de informaciones a partir del cual se llegue a la detección de las necesidades y oportunidades de inversión para el territorio sobre el que se quiera incidir. Este proceso permitirá identificar, cuantificar, jerarquizar y priorizar las acciones, tanto de reformas institucionales como de asistencia técnica (consultarías y capacitación) y las inversiones, para asignar los recursos que permitan elaborar y ejecutar un esquema compartido de desarrollo económico, social y espacial.
Su contenido estará dado por un conjunto de proyectos y programas que viabilicen y articulen las necesidades y oportunidades de inversión, respectivamente, contribuyendo al incremento de la productividad, a la reconversión de las actividades de la economía local que así lo requieran y a la generación de efectos positivos, tanto desde el punto de vista económico-social como desde la perspectiva espacial territorial. Para esto, debe contemplarse el fortalecimiento institucional de las entidades operadoras y/o ejecutaras de las acciones e inversiones que se vayan programando, a fin de que puedan gestionar por sí mismas el ciclo correspondiente a este tipo de proyectos.
Este proceso implica concebir un sistema de referencia que establezca un conjunto de previsiones sobre los tipos e intensidad de las actividades más dinámicas y con futuro, deseables y posibles, que impacten positivamente sobre los sectores críticos/clave de cada sistema productivo-territorial. La necesidad de desencadenar un proceso de esta naturaleza por lo general, surge en el seno de las comunidades a partir de diferentes factores desencadenantes. En algunos casos puede obedecer a la toma de conciencia colectiva de una situación de crisis y estancamiento, de declive económico; en otros, a la decisión de adelantarse a los acontecimientos, descubriendo y/o creando una ventaja competitiva con algunos recursos locales, para su mejor integración dentro de los espacios económicos globales.
En las experiencias de planificación estratégica, la concreción de estas necesidades se ha verificado siempre a través de la definición de un proyecto de futuro o plan estratégico concertado entre los diferentes actores públicos y privados. La participación y el consenso de los actores involucrados es decisiva; constituye una de las condiciones fundamentales para asegurar la eficacia del PED y se convierte en la principal fuerza del mismo. Para efectivizarla, en primer lugar se requiere la constitución de un organismo colectivo participativo, integrado por los distintos actores sociales que asuman la función planificadora y que luego establezcan los modos de organización para la ejecución de aquello que se ha planificado. El mismo debe reunir una amplia representación de actores públicos y privados y apoyarse, según el caso, en equipos especializados, a fin de cumplimentar el desarrollo operativo del PED. Este organismo, que en adelante denominaremos Consejo de Desarrollo Territorial (CDT), puede constituirse mediante la participación de todas las instituciones socio-económicas del territorio que manifiesten su voluntad de participar del proceso, desde los Gobiernos locales hasta las asociaciones de productores, cámaras empresariales, asociaciones intermedias, sindicatos, etc.
Estas nuevas formas de participación, implican un compromiso entre el Estado local y la sociedad civil, lo que supone la movilización y la cooperación de los diferentes actores sociales a los efectos de otorgar al PED coherencia integral, integradora y participativa. Por lo tanto el CDT no debe tomarse como una mera instancia consultiva, sino como un órgano con poder de decisión, involucrado en las diversas etapas de formulación y ejecución del PED.
El proceso de planificación se lleva adelante mediante esta organización cuyos integrantes actúan en forma separada o conjunta, según los casos y las etapas del proceso, pero vinculados por una metodología interactiva y participativa, con una dirección y un objetivo general común.
Se hace referencia a los casos francés y español, que son los más relevantes. Pero también es posible mencionar algunos intentos en nuestro propio país, como los registrados en las Provincias de Catamarca, La Rioja, y el sur de Córdoba (ADESUR), los cuales, si bien aún no han arrojado resultados, constituyen ejemplos elocuentes de la necesidad de arribar a consensos sustantivos sobre el sendero de desarrollo en el nivel de los Municipios y/o regiones.
La operatoria de formulación del PED, tal como se observa en el gráfico, suele contemplar una secuencia como la siguiente:
Debe tenerse en cuenta que la realidad sobre la que se pretende incidir no es estática, rígida, sino que siempre es variable, más aún cuando se la manipula, como es el objeto del PED. Por ello la información de que se dispone nunca es completa ni perfecta. Por el contrario, siempre es relativa, porque necesariamente se corresponde con un momento o un estado de cosas dado, por lo que tanto la recopilación como la evaluación deben constituir un proceso de permanente actualización, a fin de poder dar respuesta a los nuevos estados de cosas. Por estas cuestiones, la elaboración e implementación de un PED constituye en sí mismo un proceso iterativo, cíclico.
PLANIFICACION Y PROGRAMACION DEL DESARROLLO
Una política de desarrollo integral a escala local o regional está destinada a complementar necesidades y oportunidades de inversión, siendo una de sus finalidades, la reducción del costo territorial en todas y cada una de las localidades involucradas.
Si bien toda la política de desarrollo integral se estructura a partir del PED, se efectiviza mediante las dos herramientas principales que integran el mismo. Una de ellas es de programación físico-económica, el plan de acción (PAF), y otra de programación financiera, el plan financiero (PF). Ambas programaciones se codeterminan, en la medida en que el plan financiero garantiza la viabilidad financiera del plan de acción, además de servir como herramienta de análisis del impacto que el mismo habrá de tener en las cuentas públicas. Es decir, el plan financiero ha de ser la instancia a partir de la cual se debe plantear la viabilidad financiera de las acciones propuestas, así como de plasmar el efecto de las mismas en los distintos flujos de ingresos y egresos de las finanzas públicas.
En particular, el plan financiero ha de ser el instrumento que permitirá que cada estado local establezca lo siguiente:
iii) los proyectos específicos que se financiarán, con un énfasis en la metas cuantitativas anuales con respecto al flujo de caja público que resultará de cada proyecto. El plan de acción, en tanto, constituye la herramienta estructurante de la estrategia de desarrollo propuesta por la comunidad local.
La concreción de ambas programaciones surge luego de determinar la líneas directrices del desarrollo local y regional, local izando las inversiones promovidas sobre áreas y sectores concertados como estratégicos (expresión de un nuevo modelo de gestión de la relación entre los Estados locales y el entorno socio-económico).
Este nuevo tipo de región entre el Estado local y el medio socio-económico persigue la estimulación de cambios positivos en el mismo. Se trata de promover el bien común mediante el sostenimiento genuino de la unidad territorial en el largo plazo. En este sentido el esquema de desarrollo integral que se implemente, siempre estará basado en la utilización de criterios racionales de distribución de recursos en función de los objetivos y metas fijados por la comunidad, en la no superposición de instrumentos y en la promoción de reformas a nivel normativo que impliquen la eliminación de restricciones indebidas a las actividades económicas y dinamicen la actividad de las pequeñas y medianas empresas, induciendo mayores niveles de empleo genuino, etc.
La identificación de la demanda surgirá de un profundo proceso de interacción con los distintos actores sociales de la región, que tendrá como punto de partida, diversos procedimientos de recopilación, elaboración, análisis e interpretación de un conjunto de informaciones que permitirán identificar y cuantificar tanto las necesidades como las oportunidades de inversión que presenta el territorio que comprende la región. Asimismo, se analizará y evaluará el conjunto de ideas proyecto de que se disponga y los proyectos ya formulados, si los hubiera. También se requiere el conocimiento exhaustivo de la normativa vigente y del ámbito de aplicación de la misma, tanto a nivel territorial como institucional.
IDENTIFICACION DE LA DEMANDA
El objetivo de esta primera etapa consiste en obtener el estado de situación del territorio en cuestión, considerando la especificidad del desarrollo integral, considerando la especificidad del desarrollo integral, esto es: la codeterminación entre lo económico, lo social y lo espacial. Se trata de obtener un diagnóstico cuyos emergentes en cada uno de los casos, rigurosamente verificados, correspondan a una necesidad previamente consensuada entre los diferentes actores involucrados en cada temática. Asimismo, deberá considerarse la alternativa de que la identificación de cada necesidad trascienda los límites del área temática y comprometa un ámbito diferente del que se está considerando. A tal efecto, deberán definirse y coordinarse las incumbencias, límites, responsabilidades específicas de los organismos – actores – usuarios involucrados en los PEDs.
Sobre la base de la referida co-determinación, se analizarán y desarrollarán los aspectos económicos, sociales y espaciales, según los requerimientos de cada área. Para cada aspecto puede definirse un esquema que contenga, por una parte, un conjunto de datos, problemas, potencialidades, carencias, etc., y por otra, un conjunto de necesidades emergentes que deberían traducirse en acciones elegibles, esto es, en ideas de proyectos de desarrollo. Este esquema deberá acompañarse de los datos estadísticos disponibles según lo requiera cada aspecto (económico, social o espacial), según sigue:
El grado de desagregación dependerá de la complejidad que presente cada uno de los aspectos que se consideren, y de la problemática específica de cada una de las temáticas objeto de estudio.
Cabe destacar la importancia de este ejercicio de puesta en común, por parte de los diversos actores públicos y privados, de necesidades y oportunidades de inversión, ya que ayuda a clarificar las prioridades e interconexiones existentes entre las distintas áreas de intervención que se planteen en el PED.
ARTICULACION DE LAS POLITICAS
La inducción de una transformación efectiva del territorio por medio de proyectos que estimulen una dinámica de desarrollo sostenida requiere del elemento estructurante, el Plan Estratégico de Desarrollo, del cual el diagnóstico es el punto inicial. Para viabilizar este tipo de política, es necesario articular a los distintos sujetos e instancias institucionales involucrados, a saber:
*Los Estados locales
*El sector privado, incluyendo tanto a empresarios e instituciones representativas de la actividades económicas que tienen lugar en el territorio, como a los restantes actores e instituciones de la sociedad civil
La convergencia de distintos sujetos e instancias institucionales se corresponde con distintos niveles de participación y/o intervención, según el caso.
LOS PROYECTOS DE DESARROLLO INTEGRAL
Un proyecto de desarrollo integral se puede definir como el conjunto de antecedentes que permite estimar y ponderar las ventajas y desventajas económicas y sociales de asignar ciertos recursos escasos o limitados de un ente determinado, para la obtención de un dispositivo que tiene uno de los siguientes objetos:
*Incrementar de manera directa o indirecta, la actividad económica y/o mejorar la calidad de los productos y procesos, al mismo tiempo en que genera una interacción positiva o en el peor de los casos neutra, tanto con el medio físico del territorio como con el social
*Operar de manera directa o indirecta sobre el medio social, de manera tal que se obtengan efectos positivos sobre el mismo, al mismo tiempo en que también se generan interacciones positivas o en el peor de los casos neutras, con la actividad económica y con el medio físico del territorio;
*Operar de manera directa o indirecta sobre el medio físico del territorio, ya sea en lo espacial y/o en lo ambiental, de manera tal que se obtengan efectos positivos sobre el mismo, al mismo tiempo en que también se generan interacciones positivas o en el peor de los casos neutras, con la actividad económica y con el medio social.
Un proyecto de desarrollo integral puede definirse como el conjunto de antecedentes que permite estimar y ponderar las ventajas y desventajas económicas y sociales de asignar ciertos recursos escasos o limitados de un ente determinado, para la obtención de un objetivo dado. Sea cual fuere el énfasis relativo de dicho objetivo, el carácter integral del proyecto estará dado por la consideración que en el mismo se realice de los aspectos co-determinantes de su desarrollo, en términos de impactos positivos o bien neutros.
En otros términos, si el proyecto apunta a incrementar de manera directa o indirecta la actividad económica y/o mejor la calidad de los producto y procesos para ser verdaderamente integral, deberá contemplar la generación de una interacción positiva o, en el peor de los casos neutra, tanto con el medio físico del territorio como con el social. De la misma manera, cuando el proyecto apunte especialmente a operar de manera directa o indirecta sobre el medio social, deberá contemplar la interacción positiva con el contexto económico y físico dentro del cual se desarrollará; otro tanto ocurrirá cuando el proyecto tenga como objetivo principal operar de manera directa o indirecta sobre el medio físico del territorio -en lo espacial o en lo ambiental-, contemplándose en este caso los efectos y/o interacciones con la actividad económica y el medio social.
Estos proyectos, por lo tanto, apuntarán a la identificación y cuantificación de reformas institucionales y/ o de inversiones sectoriales en actividades que, planteadas en una de las instancias del desarrollo -esto es, la estrictamente económica, la social o la física-, no introduzcan deseconomías externas en los restantes.
Desde el punto de vista fiscal, las reformas o inversiones que se planteen, además de su efecto sobre el desarrollo propiamente dicho, deberán contemplar la expansión de la base tributaría a través de la generación de mayor producción y empleo, el mejor aprovechamiento de los recursos y/o la disminución del gasto público. Se puede decir entonces que, además de sus objetos específicos, se trata de que también posibiliten la obtención de efectos fiscales positivos.
En suma, los proyectos de desarrollo integral son instrumentos de una política que recoge las necesidades y urgencias de la economía y la sociedad local, y promueve su competitividad.
Si bien las necesidades sociales pueden aparecer como hechos aislados entre sí, en realidad forman parte de un todo global que está relacionado con el nivel de desarrollo del sistema socio-productivo. Por ello, a fin de garantizar la eficacia y la eficiencia de las acciones que se propongan, deben ser contextualizadas en el proceso de desarrollo.
Por otra parte, hay un problema habitual que se verifica tanto en los diagnósticos que orientan las políticas y programas como en las acciones que integran los mismos, a saber:
Los actores sociales comprometidos o afectados, no participan activamente ni en los diagnósticos ni en las decisiones atínenles a la formulación de políticas y programas, los que en muchos casos se realizan a pesar de ellos, en el más amplio sentido del término. Para evitar esto, y que los actores sociales participen activamente, la búsqueda de información debe hacerse de abajo hacia arriba. Esta tarea consiste en combinar el conocimiento de la realidad con los objetivos colectivos, es decir: consensuar y articular las necesidades y oportunidades de inversión que se detecten desde una perspectiva técnica, con las demandas manifiestas de los usuarios.
EL CASO A-B-C
A y B son dos localidades que hasta el momento están aisladas. Sin embargo, en general las dos son complementarias desde el punto de vista productivo, con excepción de un producto X que producen ambas y que tiene un gran mercado en D, un gran centro urbano que esta localizado a setecientos kilómetros al este de B. Hasta el momento todo el consumo de este producto que efectúa D, se abastece con importaciones.
La producción X, en ambas localidades, está en manos de una pluralidad de pequeños productores. La calidad que obtienen en general es buena, si bien es despareja de un productor a otro; la presentación del producto deja mucho que desear y los canales de comercialización son muy malos. Uno de los problemas que incide en la calidad de X es la disposición de energía, ya que es uno de los insumos principales en el proceso de su obtención. En esto, B aventaja a A.
Esto es así, porque B está provista de gas natural por red, que recibe a través de un gasoducto que se extiende desde D. A, en tanto, no cuenta con gas, y los productores de X obtienen energía quemando leña, de la cual se proveen en un frondoso bosque que se encuentra al oeste.
A la villa C afluyen turistas de ambas localidades, así como un importante flujo turístico extra regional, y la localidad tiene posibilidades de expandir su actividad convocando más turistas que buscan paisajes agrestes y/o turismo “de aventura”.
Por otra parte, A y B comparten problemas comunes, en ambas existe desempleo, los ingresos medios son bajos y los Gobiernos locales no tienen recursos para financiar inversiones. También hacen falta viviendas y tanto una como otra necesitaría disponer de un Hospital de Agudos.
En síntesis, la situación relativa de cada una de las localidades consideradas puede resumiese de la siguiente manera:
*A depende casi exclusivamente de la producción de X, es decir, es monoproductiva o monofuncional, y está ligada a actividades primarias extensivas
*B Presenta una mayor actividad económica, más diversificada
*C Se caracteriza por la producción textiles de valor artesano] dulces de frutos locales y una pequeña gama de productos derivados lácteos, además de desarrollar actividad turística
Desde el punto de vista demográfico, aunque la población crece en términos absolutos, decrece relativamente respecto de¡ total de la Provincia. A y B no actúan como concentradoras de población. El promedio de saldos migratorios de esta región es sustancialmente mayor que el que se registra a nivel provincial. Sin embargo B, ligada a circuitos de producción expansivos, muestra una tasa de crecimiento superior a A, cuyos centros de producción presentan características opuestas.
Entre A y B, sobre la ribera norte del lago se encuentra la villa C, ubicada en el faldeo de la sierra, a la que se llega por una camino de ripio que vadea una serie de arroyos. Dicho camino, que forma parte del paisaje que se vende, no puede soportar, por sus características, el tránsito pesado.
El área de asentamiento de A y B presenta, desde el punto de vista geomorfológico, un relieve ondulado, con suaves pendientes, con un marco de serranías al norte; existen algunos afloramientos hidrográficos de la región está formado por un red de pequeños ríos y arroyos que desaguan en el lago. Son de poco caudal y variable por su estacionalidad. Las napas freáticas se encuentran a mucha profundidad. Los vientos dominantes, fuertes en otoño invierno, son los del este.
El sistema de infraestructura vial se caracteriza por presentar una red primaria (nacional), que comunica a B con D, mientras que A está vinculada a un centro hacia el oeste por una carretera secundaria (provinc’lal). Existe una serie de caminos vecinales que articulan las zonas de producción extensiva con esta po-
blación y con C. El mantenimiento y conservación de la red secundaria está a cargo del Municipio y de consorcios camineros.
La generación, transmisión y transformación de energía eléctrica, se produce fuera del área. A, B y C están interconectadas por redes de distribución, integrando un sistema que recorre toda la región. El uso es fundamental para el sector residencial urbano, consumiéndose poca energía para las actividades productivas. Los costos de mantenimiento del sistema son elevados, no existiendo tarifas diferenciales para actividades productivas. La tarifa del servicio es muy elevada. Dados los problemas serios de continuidad y calidad en la prestación de los servicios en relación con los costos, resulta complicada la localización de emprendimientos industriales de alto consumo eléctrico en la región.
La red troncal de gas, proveniente desde D, abastece sólo a B. Sin embargo esta red tiene capacidad para abastecer a A.
Los servicios de infraestructura básica a nivel local son deficitarios, sobre todo en relación a la red de desagües cloacales, la cual se sustituye con pozos domiciliarios. Los Municipios no cuentan con un sistema propio de desagote de pozos sépticos. La falta de plantas de selección, tratamiento y deposición de residuos, constituye otro de los problemas a resolver en la región.
Las calles urbanas de A, B y C se hallan pavimentadas en un promedio de alrededor del cincuenta por ciento, por lo que los Gobiernos Municipales realizan una importante prestación de servicios de riego y mantenimiento de calles de tierra.
El sector salud requiere una propuesta integrada a nivel regional que se encuentra en estado avanzado de formulación. En esta área debería localizarse un Hospital de Agudos.
A presenta un deterioro progresivo tanto de su centro como de sus zonas periféricas; la actividad terciaria (comercio, servicios), se encuentra en proceso de estancamiento y recesión, con lo cual se crea una relación de dependencia de A con respecto a E (núcleo urbano que se encuentra ciento diez kilómetros al oeste). A se abastece localmente de productos primarios básicos producidos en sus huertas y matadero local. B es un núcleo urbano que, si bien posee una mayor diversidad de actividades, presenta casi las mismas dificultades que A, fundamentalmente con relación al deterioro de sus barrios periféricos.
Las áreas urbanas de cada núcleo están sobredimensionadas, por lo que podrían duplicar su población sin modificar la delimitación actual. La transición de lo urbano a lo rural se produce con características tales que constituyen una verdadera amenaza medio ambiental, tanto en lo referente al autosaneamiento del ecosistema como desde el punto de vista de la atracción que podrían ejercer estos núcleos como espacios competitivos para el asentamiento de nuevas actividades.
Las pautas de subdivisión, usos y ocupación del suelo en los límites entre lo urbano y rural, son congruentes con los usos urbanos; sin embargo, las condiciones de este entorno, son diferentes dado su origen rural. La “apropiación” de estos espacios es sumamente precaria, presentando escasez y baja calidad de servicios, todo lo cual afecta la calidad de vida de la población y contribuye a crear un escenario poco atractivo, sin identidad, no compatible con la función social y económica que debe caracterizar a cada parte del territorio.
Ninguno de los núcleos urbanos de este sistema, cuenta con suelos fiscales de valor estratégico, es decir, sólo poseen terrenos de superficie reducida cuyas localizaciones son poco atractivas desde el punto de vista de sus posibles usos (residencial, educacional, industrial, etc.). En la áreas rurales existen suelos intersticiales que han surgido como consecuencia de la construcción del sistema vial primario y que han “roto” las unidades productivas previas a su trazado.
En B se está construyendo un barrio de viviendas sociales en un sector de la periferia sin pavimentos ni servicios básicos. Además, existe una importante parcela libre con algunos servicios, de propiedad municipal, considerada por los técnicos de la zona como potencialmente industrial.
Las comunidades de A, B y C, enfrentadas a una situación de declive económico, entablan una relación a fin de asociarse y trabajar en conjunto. Identifican una serie de oportunidades y necesidades de inversión a saber:
*Incrementar la producción de aquellos bienes en cuya producción A y B son complementarias, lo que abre la perspectiva de instalar una serie de pequeñas empresas en ambas localidades, y establecer un sólido comercio intrarregional
*Ampliar la producción de X, lo que también daría lugar a la creación de nuevas pequeñas empresas, en este caso, para abastecer la demanda de D
*Incrementar la actividad turística en C, dando lugar a la instalación de un conjunto de posadas y campings, y de pequeñas empresas de servicios turísticos (desde transporte hasta guías)
*Aprovechar el valor natural y paisajístico del conjunto de la región, hecho que permitiría el incremento y la diversificación de la oferta turística
*Utilizar la diferencia entre capacidad instalada y capacidad potencial del sistema troncal de gas, para su utilización, con fines no sólo urbanos, sino también industriales, y para dotación de equipamientos
*Incrementar la producción agropecuaria regional, aprovechando las condiciones cismáticas, de relieve y las condiciones edafológicas de los suelos agrícolas
*Vincular de manera estable a A y B
*Construir viviendas en A y B
*Construir un Hospital de Agudos en ambas localidades, o uno que pueda servir a las dos
*Proveer a A de gas por red
*Formular y ejecutar un programa para unificar la producción de X, mediante:
*Formular y ejecutar y programa para mejorar los servicios turísticos en C
*En base al tipo y grado de complementariedad que se haya establecido para A, B y C, establecer las previsiones de suelo que se requieran y definir con su puesta en vigor, la delimitación de suelo urbano y suelo rural
*Rehabilitar los barrios de la periferia de A y B
*Realizare los correspondientes estudios de detalle para las zonas que requieren acciones especiales de reconversión y rehabilitación
*Consolidar el eje comercial del centro de B
*Estudiar el impacto ambiental de la alternativa de solución que se adopte para vincular A y B
*Definir la localización más adecuada para el Hospital de Agudos
*Adquirir suelo de valor estratégico para la localización de las actividades subsidiarias que originará la producción de X, y para la construcción de viviendas
*Proteger y reponer las áreas forestadas de A que se encuentran en proceso de deterioro
*Definir la localización más adecuada para el Hospital de Agudos
*Adquirir suelo de valor estratégico para la localización de las actividades subsidiarias que originará la producción de X, y para la construcción de viviendas
*Proteger y reponer las áreas forestadas de A, que se encuentran en proceso de deterioro
*Definir los usos turísticos que se requieren para consolidar e incrementar esa actividad en C y en la ribera del lago
*Proteger el espacio natural-paisajístico adyacente a la ribera del lago
*Priorizar las intervenciones para la dotación de los servicios básicos de acuerdo a las nuevas relaciones y necesidades que presenta A, B y C
*En base a las previsiones de crecimiento de la población, o más bien, conociendo para qué la población se implementará las acciones del Plan, definir tipos de subdivisión, usos y ocupación del suelo, tanto urbano como rural
*Desarrollar, para cada uno de los proyectos, el correspondiente estudio de impacto ambiental, a fin de mantener las condiciones de preservación y conservación, medio-ambiental que se requieren para garantizar la calidad de vida de la población
La vinculación física estable entre A y B, puede lograrse mediante distintas soluciones, a saber:
Puede establecerse un transporte lacustre que comunique por agua, ambas localidades, o bien la vinculación puede ser aérea, con la construcción de sendas pistas de tierra; también puede hacerse mediante un vínculo terrestre, a partir del tráfico carretero, ampliando y pavimentando el camino que bordea el lago de A hasta B pasando por villa C, y dotándolo de las obras de arte necesarias para sortear los diversos cursos de agua que escurren desde las sierras al lago sobre su ribera norte, o bien construyendo un ferrocarril con un tendido más o menos paralelo al trazado del camino actual; por último, puede construirse un puente que vincule A y B
La opción por una u otra solución, depende de la relación entre la inversión que demande la construcción de cada una de ellas, junto con los respectivos costos de operación y mantenimiento, el tipo de cosas que se ha de transportar -en calidad, cantidad y frecuencia-, y el tipo de impacto económico-social y espacial que cada una implique. Así, por ejemplo sólo se tratara del transporte de pequeñas cantidades de una sustancia liviana y muy valiosa, puede tener sentido plantearse la vinculación aérea, y puede no tener soluciones tales como la construcción del ferrocarril. De la misma manera, si se trata de una carga pesada y de no mucho valor por unidad de peso, que se debe movilizar en grandes cantidades pero solamente una semana al año, puede tener sentido el transporte lacustre, pero no las soluciones restantes.